3. Estilo educativo
Conoce nuestro estilo educativo
A – Suscita la responsabilidad
Ayudamos a los niños y jóvenes a descubrir el sentido del esfuerzo, del deber, la asunción del trabajo como enriquecimiento de la propia persona y como aportación valiosa a la sociedad. Les invitamos a tomar decisiones coherentes con sus valores y creencias, conscientes de sus obligaciones y de las consecuencias que de ellas se derivan.
En la Obra Educativa La Salle encuentran oportunidades para ejercer su responsabilidad: fidelidad a la palabra dada, exigencia y rigor en el trabajo personal, participación en la vida escolar, cooperación a favor del buen clima en la Obra Educativa, desarrollo de hábitos de orden y puntualidad.
B – Desarrolla la creatividad
Contribuimos al crecimiento personal estimulando la capacidad de creación, de iniciativa y de mirar la realidad desde ópticas diversas que permitan ofrecer las respuestas más adecuadas.
Los niños y jóvenes encuentran oportunidades para alcanzar su autonomía, el desarrollo de la originalidad, la intuición, el espíritu innovador y el espíritu crítico. Todo ello es necesario para tener flexibilidad de pensamiento, aprecio de la dimensión estética y para la construcción de su proyecto personal.
C – Estimula la convivencia
Impulsamos la aceptación mutua, la cooperación, las relaciones fraternas, la sensibilidad ante las distintas realidades que nos rodean, el respeto de las opiniones y de toda creencia, idea, costumbre o realidad personal.
En nuestra sociedad multicultural y multirreligiosa, damos especial importancia a aspectos tales como: el respeto a la diversidad y singularidad de las personas, valorar la diferencia como posibilidad de enriquecimiento, la participación en el ejercicio democrático, la igualdad, la creación de lazos entre las personas, el aprecio de la propia cultura como fuente de enriquecimiento personal y grupal -nunca como causa de exclusión-. La fraternidad se convierte en el clima que envuelve toda la actividad educativa.
D – Promueve la justicia
La escuela lasaliana tiene como meta que los niños y jóvenes conozcan, interpreten y transformen el mundo, es decir, que sean personas y ciudadanos responsables. Insistimos en la importancia de la ecología y del respeto a la integridad de la creación, la paz, los Derechos Humanos y del Niño y la cooperación desinteresada para el logro del bien común.
Educar en y para la justicia, la paz y la solidaridad supone para nosotros acercar a los niños y jóvenes a las realidades concretas de las personas más vulnerables. Desde esa cercanía facilitamos su conocimiento, potenciamos la sensibilidad, el estudio y la reflexión en torno a ellas. Ayudamos a que se formulen las preguntas adecuadas y descubran las respuestas que les lleven a actuar individual y colectivamente en acciones sociales.
Se favorece la adhesión a proyectos solidarios y el compromiso de toda la Comunidad Educativa a través de las Obras Socioeducativas y las ONGD lasalianas.
E – Cultiva la interioridad
Estamos convencidos de que en lo más profundo de cada persona debe construirse un proyecto de vida en el cual formen un todo armónico las ideas, la dimensión corporal, las emociones, las creencias, los valores y los comportamientos.
Queremos que nuestros niños y jóvenes, desarrollen las competencias de aprender a ser cada vez más reflexivos, optar con criterios éticos y leer la realidad desde un plano más allá de lo anecdótico. Con ella deben ganar en dimensión simbólica, en ser capaces de integrar el silencio en sus vidas, cultivar el compromiso y unificar su persona.
Para el desarrollo de esas competencias, potenciamos la autoestima; la expresión de las vivencias y emociones; la capacidad de empatía, admiración, sosiego y silencio; el deseo de autenticidad, el agradecimiento, la sinceridad y la reflexión.
Con todo ello, queremos que la escuela sea para nuestros alumnos y alumnas una experiencia feliz.
F – Abre a la trascendencia
La escuela lasaliana propone, invita y ayuda a toda la Comunidad Educativa a descubrir su dimensión trascendente.
Como escuela cristiana posibilita vivir la experiencia creyente y su compromiso cristiano en la Iglesia desde el Evangelio y los valores de Jesús de Nazaret descubiertos en itinerarios de crecimiento personal en el seno de la comunidad.
Los alumnos, desde la invitación y el respeto a las opciones personales, encuentran oportunidades para escuchar y acoger la Palabra, hacer suyos los valores evangélicos, vivir su propio itinerario personal acompañado por adultos, y celebrar su fe y su compromiso.
El fin principal de nuestras Obras Educativas es la evangelización. Educamos evangelizando y evangelizamos educando. Aportamos nuestro carisma a la misión de la Iglesia. Los destinatarios de la misión son todas y cada una de las personas que componen nuestras Comunidades Educativas. Padres, madres, educadores, alumnos y otros colaboradores son a la vez protagonistas y destinatarios de nuestra acción evangelizadora.
Descubre el proceso de educación en la fe
A.- La Pastoral como proyecto
Entendemos la pastoral como un proyecto que da sentido y coherencia al marco educativo de las obras La Salle y cuyo fin es acompañar en el proceso de ser y hacerse persona: la búsqueda del sentido de la vida.
La pastoral lasaliana propone los valores de fe, fraternidad y servicio a través de la cercanía, la personalización, el acompañamiento y el compromiso con los necesitados, partiendo del humanismo cristiano y de los valores del Evangelio, en comunión con la Iglesia local y universal.
B.- Enseñanza religiosa escolar
Las Obras Educativas La Salle apostamos por una Enseñanza Religiosa Escolar de calidad que fomenta el conocimiento explícito de Jesús de Nazaret y su evangelio, el diálogo fe-cultura, ayuda al análisis crítico de la sociedad y sus valores, aporta cultura religiosa, social e histórica a nuestros alumnos en su maduración como personas y en la fe como cristianos para que puedan hacer opciones personales en la construcción de un mundo más fraterno, solidario, justo y pacífico dentro de una sociedad cada vez más plural.
C.- La Pastoral como experiencia
C1.- Celebrar la fe
Proponemos momentos intensos de celebración de la fe, una fe compartida que comunique la experiencia de manera significativa y una fe encarnada en cada itinerario vital. Por ello la educación de la interioridad, las celebraciones de signos y símbolos, la iniciación a los sacramentos y el compartir la fe desde elementos claves relacionados con el lenguaje, la estética, la emoción, la relación… tienen sentido y prioridad en las Obras Educativas La Salle.
C2.- Construir la fraternidad
El estilo fraterno en las relaciones se manifiesta en el ambiente acogedor que viven los integrantes de la Comunidad Educativa. El encuentro con el otro es el que hace que seamos como somos. Es el encuentro con el otro el que nos lleva a Dios que está, vive y se manifiesta en nosotros.
El camino que debe recorrer un proyecto educativo evangelizador tiene un nombre: comunidad. En realidad, meta y camino coinciden en la comunidad. La comunidad representa el contenido y el método de nuestro proyecto educativo.
En primer lugar, como Comunidad Educativa que afronta el reto de dar educación humana y cristiana y de responder a las necesidades sociales del entorno. En segundo lugar, como comunidad cristiana que vive, comparte y celebra su fe en la misión educativa.
C3.- Vivir el servicio
Las acciones solidarias que se realizan en la Obra Educativa La Salle responden a un plan de educación para la justicia y la solidaridad. Ese plan posibilita conocer la realidad social, interpretarla e invitar a actuar en la misma.
Las campañas solidarias, las iniciativas de voluntariado, los campos de trabajo… nacen y crecen como respuestas acompañadas en el proceso de crecimiento y maduración de los niños, jóvenes y adultos y facilitan retos de compromiso personal.
C4.- Personalización y acompañamiento.
Nos esforzamos en acompañar itinerarios vitales en las Obras Educativas ofertando propuestas de procesos catecumenales, de compromiso social, talleres de solidaridad y voluntariado, participación activa en ONGD, educación para el ocio y el tiempo libre…
Todo itinerario pastoral es vocacional y debe acompañarse para ayudar a descubrir las respuestas a los interrogantes que como personas y como cristianos nos hacemos a lo largo de nuestra vida.
Nuestro estilo pedagógico
A. Coherencia y renovación
Nuestra pedagogía se rige por criterios que buscan la calidad educativa, la respuesta a las necesidades de los alumnos, el rigor científico, el trabajo cooperativo, la autonomía responsable y la sintonía con los avances tecnológicos y las metodologías didácticas más eficaces.
Fomentamos la formación, la actualización permanente y la creatividad del profesorado para responder a los retos educativos con total profesionalidad, sentido de equipo y eficacia docente.
B. Educación centrada en el alumno
La persona es el centro de toda la acción educativa. Fomentamos la personalización en la formación, el conocimiento del niño y joven y el acompañamiento en su proceso de aprendizaje que conduzcan al desarrollo de todas sus potencialidades.
Ayudamos a cada uno a ser consciente de sus esfuerzos, éxitos o dificultades en el aprendizaje; así como a que sepa apreciar y estimar las ayudas y medios que se le proporcionan. Consideramos que todo avance se apoya en la exigencia personal y en el esfuerzo constante, origen de su propia estima.
C. Atención a la diversidad
Optamos por la educación inclusiva. Orientamos nuestra educación hacia el desarrollo integral de cada persona, respetando sus ritmos y capacidades; atendemos a la diversidad de situaciones, ofreciendo a cada uno oportunidades para su pleno desarrollo.
Las características personales, familiares y sociales dan origen a situaciones de niños y jóvenes que implican una atención personalizada. Para lograrla, y también para que cada niño y joven encuentre personas y lugares de acogida, ofrecemos todos los recursos disponibles: tutoría individual y grupal, servicio de orientación, programas de integración y dinámicas adecuadas para la atención a la diversidad.
D. Desarrollo integral
Nuestra propuesta pedagógica quiere responder a los cuatro aprendizajes básicos: aprender a conocer, a hacer, a ser y a convivir.
Tiene como referencia el desarrollo de las inteligencias múltiples y ofrece dinamismos adecuados para el desarrollo de las competencias que faciliten la coherencia entre el aprendizaje desarrollado en la escuela y las capacidades que la sociedad demanda.
Cada niño y joven tiene la oportunidad de desarrollar todas sus habilidades cognitivas y de adquirir una sólida cultura. Esto se traduce en el logro de una creciente autonomía, en la seguridad ante diversas situaciones, en la capacidad para enfrentarse a la adversidad, en el sentido ético y en el deseo de aprender durante toda la vida.
E. Pedagogía innovadora: Aprendizaje Cooperativo y Programas La Salle
La Obra Educativa La Salle entiende la educación como un proceso de enseñanza-aprendizaje en el que los alumnos son los principales protagonistas de su propia formación y crecimiento personal. Mediante el Aprendizaje Cooperativo y por Proyectos, junto a los Programas La Salle de Estimulación y Desarrollo de Capacidades, desarrollamos una pedagogía innovadora, con procesos que aseguran el acompañamiento, la evaluación y mejora continua de estos programas.
F. Tecnologías de la Información y la Comunicación
Las Obras Educativas La Salle incorporan de modo constante los avances tecnológicos poniéndolos al servicio de la dinámica pedagógica en el proceso de enseñanza-aprendizaje, de la relación con los alumnos y sus familias y de la organización interna en favor de la mejora continua de la calidad educativa. Apostamos por ellas como una dinámica clave para el desarrollo de las competencias que demanda la sociedad.
Formamos en el uso de dichas tecnologías desde la valoración crítica, haciendo prevalecer los valores personales, éticos y relacionales sobre lo puramente técnico.
G. Enseñanza de idiomas y formación en la comunicación.
Las Obras Educativas La Salle potencian el aprendizaje de los idiomas, los proyectos plurilingües y desarrollan programas adecuados para ello ofreciendo experiencias variadas. Ayudan a conocer y apreciar los distintos lenguajes, para saber expresarse y enriquecer la comunicación.
Proporcionan las claves para comprender los códigos y símbolos que usan las diferentes culturas, para valorar e interpretar sus mensajes y comprometerse en su desarrollo. Nuestras respuestas, creativas y plurales, preparan para responder eficazmente a los cambios incesantes que se producen en la sociedad.
H. Educar la conciencia crítica
La educación lasaliana ayuda a los niños y jóvenes a percibir el mundo circundante y los hechos que en él se producen con sentido crítico, para saber descubrir los valores y contravalores que encierra la sociedad plural.
La reflexión diaria de la mañana y la tutoría son tradiciones lasalianas y una forma de mantener a los alumnos atentos a la realidad de la vida y a sus diversos significados.
I. Educar para el ocio y el empleo del tiempo libre
Entendemos la actividad educativa como “escuela a tiempo completo”. No se limita ni al tiempo ni al espacio escolar; se realiza en cooperación con otras instituciones.
Por ello, potenciamos el uso formativo de los medios de comunicación, la Educación en el Tiempo Libre, la práctica del deporte, la organización de grupos y asociaciones, el voluntariado. Damos cauce a las posibilidades de esparcimiento, de compromiso social y de vivencia espiritual.
J. Evaluación de la propuesta educativa
En La Obra Educativa La Salle la evaluación ocupa un lugar importante como medio de diálogo, de comprensión, revisión y mejora de la práctica educativa para responder mejor a las necesidades actuales.
Promovemos una reflexión permanente sobre nuestra propuesta educativa. Mediante esta evaluación, recogemos la información precisa sobre la dinámica de la Obra Educativa, los procesos desarrollados, los resultados y sobre otros aspectos educativos.
Desarrollamos una Evaluación Institucional sistemática para garantizar la fidelidad de la Obra Educativa La Salle al carisma lasaliano.