En el primer ciclo de Primaria consideramos que la lectura es una herramienta fundamental para el aprendizaje y el desarrollo integral de nuestro alumnado. Leer no solo nos ayuda a comprender mejor el mundo, sino que también estimula nuestra imaginación, creatividad y capacidad crítica.
Antes de comenzar el proceso lector, dedicamos tiempo al trabajo previo, una fase esencial para despertar el interés y preparar la mente para la comprensión. Este trabajo incluye actividades como la observación de la portada e ilustraciones, la predicción del contenido, la activación de conocimientos previos y la conversación sobre el tema del texto. De esta manera, los niños y niñas se acercan a la lectura con curiosidad y expectativas, lo que facilita una comprensión más profunda y significativa. A través de la lectura se descubren nuevas ideas, amplían su vocabulario y mejoran su fluidez y comprensión lectora. Cuanto más practican la lectura, mejor entienden y más disfrutan del proceso.

Además, el acompañamiento del docente y el trabajo en grupo permiten que compartan sus interpretaciones, formulen preguntas y desarrollen estrategias para enfrentarse a distintos tipos de textos. En nuestras clases contamos con una biblioteca de aula y un rincón de lectura, un espacio acogedor pensado para disfrutar de los libros y fomentar el hábito lector. También buscamos otros momentos de encuentro en el ágora de la planta, donde compartimos experiencias y lecturas con el resto de compañeros, enriqueciendo así el aprendizaje colectivo. Todas estas actividades tienen un objetivo común: favorecer el gusto por la lectura y hacer que los libros sean parte del día a día de nuestros alumnos. A través de este proceso, aprenden no solo a leer, sino a interpretar, reflexionar y disfrutar del lenguaje escrito como una fuente de conocimiento y placer.

¡Leer cada día nos ayuda a crecer en lenguaje, imaginación, concentración y sensibilidad hacia el mundo que nos rodea!