Nuestro plan de tutoría persigue, entre otros objetivos, acercar a los alumnos algunos temas que puedan resultar de su interés. Esos tópicos, adecuados según la edad del alumnado, se apoyan, cuando es posible, con la presencia de personas que pueden aportar su experiencia vital.
En el colegio contamos en este momento con el Hno. Villalabeitia, que ha vivido largo tiempo en Guinea y por ese motivo ha colaborado con algún medio de prensa como verificador de noticias que concerniesen a ese estado.
El viernes 25 de marzo se acercó a nuestro alumnado de Bachillerato con una ponencia en la que hizo reflexionar acerca de los mensajes a los que cotidianamente somos expuestos. Nuestra sociedad ha cambiado y la manipulación de la información ha adquirido nuevas formas y medios, que comprometen nuestro pensamiento. Es nuestra obligación como personas adultas y responsables tomar conciencia de la situación, para preservar la verdad.
En estos momentos en que estamos viviendo un conflicto bélico, vemos cómo esta verdad es la primera víctima. La inmediatez de Internet nos expone a mensajes que no siempre han sido contrastados, forzando situaciones en las que se impone llegar primero, aunque no tengamos el respaldo necesario.
Esa dinámica se ha impuesto también en las redes sociales, donde se aumenta el riesgo con los ejércitos de bots que difunden contenidos voluntariamente dirigidos. Recibimos mensajes que refuerzan las ideas preconcebidas y, al darles difusión, nosotros contribuimos también con la mentira (total o parcial). Este fenómeno, mucho menos evidente de lo que podría parecer, tranquiliza nuestra conciencia al evitarnos contradicciones.
Contribuir a la verdad resulta complejo y también necesario. Debemos tener en cuenta la fuente, identificar la finalidad del mensaje y considerar su objetividad. La incorrecta ortografía o gramática, así como las atribuciones y fechas, pueden ser indicios de manipulación. No todo es malo en Internet. En ese medio disponemos también de herramientas digitales como verificadores de noticias o la Policía Nacional, que nos ayudan a determinar la veracidad de un mensaje.
Los alumnos disfrutaron de la experiencia. El Hno. Josean Villalabeitia supo llegar hasta ellos, que le agradecieron su interés. No pudo cerrar de otra manera que apelando a la responsabilidad individual. Al final, esta es la clave para filtrar las informaciones a las que cada día estamos expuestos.