¿Quién no conoce el clásico juego hundir la flota? ¿Cuántas horas de diversión, estrategia y devanarse la cabeza buscando la mejor formación posible de las embarcaciones con el objetivo de que no sean descubiertas? Lo mismo les sucedió a los profes de matemáticas de nuestro 1º de la ESO, que decidieron versionar el famoso juego hasta obtener el Hundir la función (el nombre está aún por registrar pero queda bastante aparente, ¿verdad?).

En el desarrollo del juego los alumnos deben poner en práctica lo aprendido a lo largo del tema de funciones matemáticas, teniendo que situar en el tablero propio dos funciones, y por turnos ir encontrando información acerca de las funciones del compañero.
Las funciones en matemáticas estudian la relación entre dos magnitudes. Esta relación se puede expresar en forma de expresión numérica o de forma gráfica. Uno de los trabajos que se pretenden desarrollar con los alumnos es el paso de una forma a la otra de funciones lineales y afines, que tienen en común que su gráfica es una recta.
Se trata, por tanto, de una puesta en escena muy exitosa de la metodología de gamificación en la que el alumno, mientras juega y se divierte, necesita echar mano de los conocimientos que ha adquirido, pues en caso contrario no tendrá éxito. ¡Ya solamente falta practicar y seguir jugando mientras aprenden!