Hoy, viernes 5 de junio habría tenido lugar la tradicional carrera y fiesta solidaria en favor de Proyde. Un evento en el que aprovechamos para reunirnos y celebrar que se acerca el fin de curso, al tiempo que mostramos nuestro apoyo a una causa justa.
De haber podido seguir la tradición, estaríamos con nuestra camiseta de la carrera puesta, en la línea de salida preparados con el dorsal solidario colocado, recibiendo las animadas voces de todos los presentes en cada zancada dada.
Continuaríamos con la fiesta, disfrutando de los castillos hinchables, el puesto de Comercio Justo, los sorteos, los concursos de postres, la barbacoa y del bar ¡y muchas más actividades preparadas! Todo amenizado con buena ambientación musical y la mejor compañía: todos nosotros.
Un momento de convivencia y solidaridad que ya es toda una tradición en San Rafael. Pero la excepcionalidad de la situación sanitaria nos ha alejado físicamente del colegio, en una etapa educativa no presencial, en la que nos encontramos más unidos y conectados que nunca, superando juntos este momento tan duro. Todo ello no impide a esta gran comunidad escolar, seguir creyendo y apoyando a Proyde: una ONG con 30 años de trabajo cuenta con nuestro apoyo para continuar con las obras en el Colegio La Salle de Rumbek, en Sudán del Sur, donde los Hermano de La Salle están presentes en su apuesta por el desarrollo desde la educación.
Un proyecto, una ilusión, un cambio.
Entre todos podemos lograrlo.
Mucha gente pequeña, en muchos lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo.
