Este año, los alumnos de 3º de ESO han adquirido los conocimientos que cualquier persona debe tener sobre la historia de la música culta, popularmente llamada clásica. La música siempre ha sido un vehículo privilegiado para conducir las emociones humanas y su aprendizaje ayuda a los estudiantes a apreciar la diversidad cultural y a conectarse con la historia y la tradición musical de diferentes épocas, ampliando sus experiencias y expectativas.

A lo largo del curso, además de aprender la cronología, las características y los compositores más importantes de cada una de las épocas, han intercalado diferentes actividades de profundización, en función del tema que se estuviese tratando. De esta manera, han aprendido a transcribir una partitura de canto gregoriano a nuestra notación actual, han interpretado partituras de música clásica así como piezas compuestas por ellos mismos.

La música empapa muchos ámbitos de nuestra vida y para descubrirlo, hemos utilizado la música clásica para sonorizar proyectos audiovisuales y escenificado historias con lo que nos transmite la música, dando rienda suelta a la expresión corporal. Incluso hemos realizado coreografías con danzas del Renacimiento y el Barroco como la pavana y la courante.

Ahora que Madrid se reivindica como una de las capitales mundiales del musical, nos hemos adentrado también en la historia de este género, estudiando su relación con la ópera clásica y su concepción como obra de arte total.

Por supuesto, no hemos dejado de lado el descubrimiento de las obras más significativas del repertorio a través de la audición, investigando los compositores de cada época y los cambios en los instrumentos que permitían indagar nuevos sonidos. Precisamente en este sentido, los alumnos se han convertido en lutieres, creando réplicas de instrumentos musicales con materiales a su alcance.